Y esto no es nada.
Ambas cosas son causadas por la placa bacteriana.
Bichos en la boca tenemos todos y los tenemos durante toda la vida. La placa bacteriana es la mezcla de bichos y saliva, y no es visible (aunque si hay suficiente se ve como una peliculita blancuzca, medio pegasosa y medio olorosa). El objetivo del cepillado, mis queridos, es remover esa peliculita. Pero hay que removerla a tiempo, por eso todos los dentistas te rompen las bolas con cepillarse 3 veces por día. Lo que hay que evitar es que los bichos se acumulen y organicen. Si los dejás, forman colonias y se acomodan y empiezan a interactuar con la comida (especialmente los DULCES, por eso los dentistas no te dejan comer caramelos) y a generar juguitos ácidos o básicos, según el tipo de bicho que predomine en la boca. Juguitos más ácidos generan caries, juguitos más básicos te van jodiendo las encías. Por eso por lo general en las personas predomina uno u otro problema: o caries o problemas de encías. Por supuesto, hay algunos suertudos cuya placa bacteriana genera juguitos tirando a neutro, y no sufren mucho de ninguna de las dos cosas. Si la placa queda sin ser molestada por suficiente tiempo, se empieza a calcificar y se forma el sarro. El sarro, que puede formarse tanto fuera como adentro de la encía, provee más superficie de agarre para la placa, y es un círculo vicioso. Partiendo de dientes limpitos, durante 4 a 8 horas hay poco bicho en la placa. De 8 a 12 horas la placa aumenta de grosor. De 12 a 24 horas ya empiezan a aparecer bichos jodidos (los cocos). De ahí en adelante, ya se empiezan a organizar y a armar colonias. Por eso te dicen que te laves 3 veces por día, la idea es evitar que pasen más de 8 horas sin remover placa. Una vez que le pasás el cepillo tienen que empezar de cero. Lo de lavarte después de comer es más que nada para que los bichos tengan acceso a la menor cantidad posible de morfi. Ojo. Cepillarte no sirve para una merda si lo hacés mal. A saber: 1) El objetivo es remover placa, que se forma en toda la superficie de los dientes, así que una pasadita rápida por las caras más accesibles de los dientes te deja con media boca sin limpiar, aunque seas un maniático que lo hace 20 veces por día. Es tiempo perdido. 2) No hace falta fuerza. La placa está depositada sobre el diente pero suelta; sale por arrastre de las cerdas y no por la fuerza que uno haga. De hecho, si uno se va de mambo hace pelota las encías. Lastimarlas durante el cepillado hace que se retraigan, sabelo (me pasó). 3) Los cepillos suaves y cortitos son mejores porque se pueden meter en más resquicios y porque son menos agresivos para las encías. 4) Hay que pedirle al dentista que te diga la mejor manera de cepillarse. A mí me toca: sin agua, sin dentífrico, cepillo a 90º, de a 2 piezas, hacia atrás y adelante 10 veces. Los dientes del lado de adentro, con el cepillo de punta. 5) Con el cepillo solo no alcanza. Entre los dientes también se forma placa y el cepillo ahí no llega. Para eso está el hilo dental, los palitos y los cepillitos interdentarios. Eso también te tiene que indicar el tordo, pero desde ya te digo que no zafás de tener que limpiarte ahí también. 6) Vos estás convencidísimo de que sos un/a champion lavándote el comedor? Aceptá el desafío del espejito: mirate el interior de los dientes de arriba con un espejo y después me contursi.
Bueno, mi intención es compartir con ustedes lo que estuve averiguando últimamente. Ni me pienso molestar en citar las fuentes porque con sólo googlear "placa dental" están ahí. Tampoco me hago cargo de nada que escribí, jeje. Bah, me tengo fe. Igual, si algo raro notás en tu boca:
***ANDÁ AL DENTISTA***
Bueno, mi intención es compartir con ustedes lo que estuve averiguando últimamente. Ni me pienso molestar en citar las fuentes porque con sólo googlear "placa dental" están ahí. Tampoco me hago cargo de nada que escribí, jeje. Bah, me tengo fe. Igual, si algo raro notás en tu boca:
***ANDÁ AL DENTISTA***