lunes, enero 18, 2010

Vistiendo la verdad...

En una noche de pleno invierno, la verdad andaba desnuda por la ciudad y decidió salir a divertirse.
Se dirigió precisamente a la fiesta del pueblo, adonde asistirían todas las personas.

Al llegar, intento sin éxito alguno sociabilizar con todas las personas de la fiesta. Su desnudez, su crudeza y su cuerpo, eran lo más hermoso que podía verse en toda la kermes, pero aun así, parecía ignorada por todas las personas.

Intento acercarse a un grupo de jóvenes, pero se le rieron en la cara y se fue ofendida. Más tarde, dialogo con un grupo de ancianos, pero enojados se dieron media vuelta, explicándole que no querían escucharla. Y por último, hablo con un grupo de mujeres, que luego de prestarle atención por algunos minutos, se fueron ofendidas llorando. LEER MAS.