En un pequeñisimo pueblo de un país asiático vivía Hikaru con su hijo Yuto. La esposa y madre habia fallecido hace menos de dos años y es por eso que ellos dos vivían solos.
Yuto tiene diecisiete años y su padre, Hikaru, sesenta. Ambos trabajan en su tienda de pescados que tienen en la feria del pequeño pueblo adonde habitan.
Pero Yuto aparte de ser un trabajador tiene la mentalidad de un niño, juega absolutamente todo el día. Se junta con niños menores y se presta a cualquier diversión con una sonrisa estampada en la cara. LEER MAS AQUI.